Todavía hace poco tiempo que encontré uno de mis dientes de leche en un monedero que guarda mi madre. Aunque pensándolo ahora, no sé si sería mío o de mi hermano... Habría que llevarlo a analizar. Y quitando el dudoso diente de leche y la cartilla del médico no me suena ver nada más que atestigüe que fui bebé. Así que cuando nació mi hijo le guardé un montón de cosas significativas de sus primeros meses, pero ya se sabe, en casa del herrero cuchillo de palo así que lo metí todo en una caja de zapatos... cutrez máxima.
Por eso llevaba un tiempo con la idea de hacer una caja de recuerdos para el bebé.
Me parecen un detalle muy original para regalar en nacimientos y podemos llenarlas de todo aquello que es significativo en la vida de nuestros peques. En la parte de la contraportada hice una pequeña composición bajo el título "mi historia", pero se me ocurren otras cosas como poner una foto del bebé y una tarjeta con los datos del nacimiento.
Y ¿qué podemos meter en la caja de los recuerdos? Hay dos opciones; poner lo que estrictamente esté ligado con su nacimiento o, por el contrario y como yo hice, incluir todo aquello que resulte importante desde antes de su nacimiento y según va creciendo.
Por si os sirve de idea os digo lo que atesora la de mi hijo: las ecografías, las tarjetas de felicitación de su nacimiento, la pulsera del hospital, la pinza del ombligo, la ropa con la que salió del hospital, su primer body, sus primeros zapatos, sus primero calcetines, los zapatos con los que empezó a andar, su peine de bebé, un bote vacío de su primera colonia, un mechón de pelo, su sonajero, la camiseta con la que salió del hospital después de una operación que le hicieron con 20 días, su primer, único y poco chupado chupete y su primer diente de leche. No sé si desde ahora en adelante nos quedarán ya muchas cosas por incluir pero estoy segura que cuando pasen unos años le gustará ver todos esos pequeños tesoros.
Si quieres regalar una caja de recuerdos yo te ayudo a que sea la que más se adapte a tus preferencias y, además la hacemos a tú gusto. Todo sea porque no haya más dientes de leche sin identificar por el mundo. ¿Tú conservas algún recuerdo de tú época de bebé?
